viernes, enero 25, 2008

 

LOS PLANES DE LA EXTREMA DERECHA


Si que llevaban tiempo preparando el plan para darle la puñalada trapera a Gallardón y colocar a €sppe.

En Periodismo Incendiario lo publicaron hace màs de un año.


" Utilizar las elecciones autonómicas y locales de mayo de 2006 para consolidar a Esperanza Aguirre como alternativa a Rajoy. Para ello es necesario defenestrar o malherir al otro aspirante, Alberto Ruiz-Gallardón."


"Así que la decisión que han tomado los líderes visibles de esa operacion para llevar a la extrema derecha al poder (Pedro J. Ramirez, el bandolero Federico Jiménez, Esperanza Aguirre y Eduardo Zaplana) es acelerar al máximo la decapitación política de Rajoy, de forma que ya no sea el candidato en las próximas generales"


LOS PLANES DE LA EXTREMA DERECHA


Zapatero ha denunciado la existencia de una "nueva extrema derecha" que pretende revisar la historia, deslegitimar a las instituciones democráticas y cuestionar los resultados electorales. Discrepo de ZP. Esos objetivos son clásicos de la extrema derecha. Y, sin embargo, sí existe una situación nueva en la política española: por primera vez desde el fallido golpe de Estado de 1981, la extrema derecha ha diseñado una operación realista con la esperanza de tomar el poder. Lo primero que necesita para que triunfe su plan es cambiar el liderazgo dentro del Partido Popular. Tras la derrota del 14-M, esa extrema derecha pensó que el momento ideal para hacerse con la dirección del PP sería tras las próximas elecciones generales, cuando se estrellase en las urnas Rajoy, a quien tienen reservado el papel de tonto útil que se comerá el marrón de la derrota electoral y luego se marchará para casita. Pero en esas cuentas estaba previsto un adelanto de los comicios, con el que llevan soñado durante más de dos años, y que ahora ya parece descartado. Así que la decisión que han tomado los líderes visibles de esa operacion para llevar a la extrema derecha al poder (Pedro J. Ramirez, el bandolero Federico Jiménez, Esperanza Aguirre y Eduardo Zaplana) es acelerar al máximo la decapitación política de Rajoy, de forma que ya no sea el candidato en las próximas generales. La minuciosa preparación del golpe palaciego contempla un asalto en dos movimientos: 1) Provocar el mayor descalabro electoral posible de Josep Piqué, considerado como un "criptonacionalista" por la extrema derecha, para culpar a Rajoy y sustituirlo de paso por Aleix Vidal-Cuadras. Eso explica que relancen con tanta virulencia las insidias sobre el 11-M justo dos meses antes de las elecciones catalanas, cuando hasta el más descerebrado analista electoral sabe que es un asunto que perjudica al PP en Cataluña. 2) Utilizar las elecciones autonómicas y locales de mayo de 2006 para consolidar a Esperanza Aguirre como alternativa a Rajoy. Para ello es necesario defenestrar o malherir al otro aspirante, Alberto Ruiz-Gallardón. En la COPE y Libelo Digital ya han iniciado una campaña de boictot al actual alcalde de Madrid, con un llamamiento a abstenerse en los comicios municipales. Y en La Razon, este mismo domingo, publicaban una increible encuesta que sitúa a Esperanza Aguirre como la dirigente mejor valorada por los madrileños. Encuesta que se apresuraba a difundir también Libelo Digital, con este significativo titular: "Esperanza Aguirre aumenta su mayoría electoral y ya es mejor valorada que Zapatero y Rajoy por los madrileños". De momento, sólo un columnista importante de la derecha ha escrito con meridiana claridad sobre la operación para defenestrar a Rajoy. Fue Ignacio Camacho, en La Tercera de ABC que publicó el pasado miércoles: Secuestrada y arrastrada por el discurso radical de algunos fanáticos, el pragmatismo oportunista de cierto periodismo y la ambición de poder manifiesta en miembros de su propio elenco, la dirección del Partido Popular ha permitido que le impongan desde fuera las líneas de una acción política que le conduce inexorablemente a un nuevo fracaso electoral. El horizonte de esa estrategia es la sustitución del líder del PP, Mariano Rajoy, mediante la inducción de su derrota. Quienes mueven los hilos de la estrategia parlamentaria de la oposición, ante la acomodada pasividad de Rajoy, son tan conscientes como debería serlo el propio afectado de que las encuestas insisten en que la agitación retrospectiva de esas aguas conduce al electorado español a una polarización idéntica a la de los días del 11 y el 14-M, la de las horas amargas de los titubeantes corbatas negras y la crepitación turbulenta de los sms. Que la operación está en marcha, admite pocas dudas. Que por primera vez la extrema derecha tiene la posibilidad de hacerse con la dirección de un partido de masas como el PP, es un riesgo cierto. En caso de que el fascio triunfe, quedaría no obstante una incógnita por despejar: ¿se someteran los centristas que hay en el PP al discurso de la extrema derecha o montarán otro partido?


http://periodismoincendiario.blogspot.com/2006/09/los-planes-de-la-extrema-derecha.html

Comments: Publicar un comentario



<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?